
Receta de torrijas de Semana Santa de la abuela Pili
Frío, lluvia, hasta unos copos de nieve han caído esta tarde… el tiempo realmente no acompaña, necesitamos algo dulce y con calorías para levantar el ánimo.
Y ya que estamos en Semana Santa, ¿qué mejor que aprovechar y hacer una receta de torrijas típicas de esta época?
De acuerdo, muy lights no son, pero ¡quién se resiste!
Esta receta de torrijas de Semana Santa la hemos hecho con la abuela Pilar, y hemos empleado su versión que consiste en terminarlas con un poco de almibar de miel.
Ingredientes para las torrijas de Semana Santa
- Pan (si puede ser del día anterior mejor)
- Leche entera
- 4 cucharadas de azúcar
- 1 palito de canela en rama
- Huevos
- Miel
- aceite de oliva o de girasol, para freir
No os pongo las cantidades exactas porque dependerá mucho de la cantidad de torrijas que queráis hacer.
Pasos para preparar las torrijas
Paso 1. Templar en una cazuela la leche, con tres cucharadas de azúcar y añadir el palito de canela para que infusione bien. No es necesario hervir, así que poned el fuego a poca potencia.
Paso 2. Cortar el pan para las torrijas
Mientras tanto, cortad el pan en rebanadas, más o menos gruesas en función de vuestro gusto.
Paso 3. Hay que colocar el pan para las torrijas en una fuente.
Paso 4. Retirad la canela de la leche e id vertiéndola poco a poco encima del pan.
Deberéis dejarlo más o menos 10 minutos (aumentad este tiempo si utilizáis pan duro del día anterior)
Paso 5. Batid huevo y mojad cada trozo de pan una vez hayáis escurrido la leche.
Paso 6. Freid en abundante aceite caliente las torrijas hasta que estén doradas por ambos lados.
No olvidéis retirar el exceso de aceite colocándolas sobre un papel absorbente.
Paso 7. Preparad el almibar de miel. Es muy sencillo, simplemente en un cazo incorporar agua, azúcar y una cucharada de miel. Es como hacer caramelo, pero no debe quedar tan espeso.
Normalmente se espolvorean de azúcar una vez fritas, sin embargo, la opción de poner un chorrito de almibar de miel, le dan un toque especial.
Y ya están listas para comer, las podéis dejar enfriar, aunque la tentación de comerlas recién hechas es demasiado fuerte.
¿Qué versión de las torrijas es la que se prepara en vuestra casa? Podéis contarlo dejando un comentario y si os gusta, ¡gracias por compartir!